¿Por qué desde hace un tiempo se pagan las bolsas de plástico? ¿Es una medida que ayuda a su erradicación? ¿Se conseguirá mejorar el medio ambiente? Seguro que alguna de estas preguntas se te pasa por la cabeza cada vez que ves a alguien o a ti mismo pagar por una bolsa de plástico. Y es que, lo que en sus comienzos pudo ser un poco “chocante” hoy en día es una práctica más que extendida.
La normativa
El Gobierno aprobó en mayo del año pasado una normativa que establece que los usuarios deben pagar por las bolsas de plástico ligeras que en muchos comercios todavía se entregaban de forma gratuita.
Esta iniciativa se tomó con el objetivo de que en el año 2021 este tipo de bolsas estén completamente prohibidas, salvo las fabricadas con material compostable. Los ecologistas no están de acuerdo con esta medida puesto que el material compostable puede contener plástico y solo se degradará bajo condiciones industriales o de laboratorio muy concretas. 
Con ella se pretende conseguir:
- Reducir hasta en 90 bolsas de plástico ligeras por persona al año hasta diciembre de 2019 y en 40 bolsas al año en diciembre de 2025.
- Las bolsas de plástico de mayor grosor (más de 50 micras) se esperan reducir en un 30%.
- Aumentar la información de reciclaje gracias al nuevo marcado de las bolsas.
¿Qué tipos hay?
Los comercios utilizan diferentes tipos de bolsas de plástico como las:
- Ligeras: Son las más extendidas y deben tener un grosor menor a 50 micras.
- Muy ligeras: Su espesor es menor a 15 micras. Habitualmente se utilizan para la fruta, verduras…).
- Oxodegradables: Estas bolsas contienen aditivos que una vez que se desechan, se transforman en microfragmentos.
- Compostables: También se las conoce como bolsas biodegradables que se fabrican a partir de almidón de cereal.
Las razones
La principal razón para tomar esta medida radica en que las bolsas de plástico son sumamente nocivas para el medio ambiente debido a su baja reutilización. La mayor parte de ellas terminan en el mar contaminando los océanos y envenenando su fauna.
De todas las bolsas que se utilizan y fabrican solamente un 1% se recicla, y las desechadas tardan más de 1.000 años en desaparecer del planeta, dejando un impacto muy negativo durante estos años.
¿Ya te has pasado a las bolsas reutilizables y desechables?
