Las mascotas se convierten en parte de la familia, y por eso deben estar debidamente identificadas. Con el chip electrónico podemos lograr esto. Ponerle un chip a tu perro tiene muchas ventajas ya que contiene toda la información necesaria, como dirección, teléfono y nombre de los dueños, de esta manera si tu mascota se llega a perder sabrán a quién pertenece. Esta medida es obligatoria en Madrid desde 1993, y en la mayoría de los países también.
El sistema consta de dos partes: un microchip y una cápsula que lo cubre, tiene el tamaño de un grano de arroz. El veterinario «inyecta» el chip bajo la piel del cuello y se suele hacer cuando el perro tiene dos meses. El objetivo es identificar a los animales para evitar abandonos y abusos, para evitar robos y, ante todo, facilitar que cualquier perro perdido pueda volver cuanto antes junto a su familia.
Es importante mantener siempre actualizados los datos asociados al chip de tu perro: si cambias de móvil o de domicilio, debes avisar a tu veterinario para que se actualice la información.
Si tu mascota se ha perdido es importante avisar de la pérdida al Registro de identificación de animales de tu comunidad. En ese caso, si alguien lo encuentra puede llevarlo a cualquier clínica veterinaria donde le pueden mirar su microchip para saber quién es su dueño. También puedes llamar a la Policía Local, para avisar, los agentes, normalmente verificarán si tiene chip para localizar al propietario.
La manera de saber si un perro tiene chip es con un lector especial para poder leer los datos. Normalmente todos los veterinarios tienen uno de estos escáneres, y la policía también. Por eso, si te encuentras con un perro perdido en cualquier lado, lo mejor es tratar de acercarle hasta algún veterinario, para que puedan mirar a ver si lleva chip y llamar a su dueño.
Consejos
- Identificar al perro cuando es un cachorro.
- La implantación del microchip debe llevarla a cabo un veterinario.
- Mantener actualizada la información del chip (dirección y móvil).
- En caso de encontrar un perro perdido, acudir a la clínica veterinaria para que comprueben si el animal tiene microchip.
